La sedación consciente mejora la experiencia de ir al dentista


Sannas Dentofacial

Print Friendly, PDF & Email
Logo SANNAS_ZHn52
Estudios realizados en Odontología han demostrado que casi un 65% de los pacientes experimenta ansiedad a la hora de ir al dentista. Este problema es más acuciante cuando los pacientes tienen algún tipo de discapacidad, son niños pequeños o personas que padecen fobia. La solución: la sedación consciente.

Ya empleada en países con un mayor grado de especialización odontológica, la sedación consciente llega a la Comunidad Foral. Se trata de una técnica anestésica que reduce la ansiedad y la tensión del paciente, llevándole a un estado de bienestar y conciencia mínima que favorece su colaboración y facilita la labor del profesional.

Sannas mejora tu experiencia

Desde que aprobaron su uso en España, Sannas Dentofacial ha sido una de las primeras en implantar esta técnica odontológica.

Las variantes de sedación consciente que ya realiza la Clínica Sannas Dentofacial abarcan, desde la más sencilla y común, como es la administración de ansiolíticos por vía oral, hasta la sedación por vía intravenosa, pasando por la más innovadora y utilizada a nivel internacional, que consiste en el suministro de Óxido Nitroso (Protóxido) vía inhalatoria.

En el caso de procedimientos odontológicos en los cuales resulta indispensable la colaboración del paciente, la sedación consciente a través de la inhalación de Óxido Nitroso es la más adecuada, según el Director Médico de Sannas. Esta novedosa técnica mantiene la consciencia del paciente, pero reduce sus niveles de estrés y de ansiedad, proporcionándole una experiencia relajada y capacidad de colaboración con el profesional.

Sin embargo, para procedimientos quirúrgicos de mayor envergadura, el Director Médico de Sannas pone a disposición del paciente el método de la sedación intravenosa consciente. Este método está indicado para tratamientos complejos como implantes dentales, quistes, dientes incluidos, extracciones de alta dificultad, etc.

A pesar de que los tres tipos de sedación mejoran la experiencia de acudir al dentista, esta última se indica especialmente para pacientes con alto grado de fobia dental, cierto grado de minusvalías, pacientes pediátricos de difícil manejo o en procedimientos complejos o prolongados.

Control y monitorización profesional

La práctica de la sedación requiere, por ley, una autorización previa por parte de la administración y un médico especializado en anestesiología que controle el estado general del paciente durante toda la intervención. Resulta esencial que un profesional colegiado monitorice las constantes vitales, el aparato respiratorio y cardiovascular, y adecúe la intensidad y el tiempo de exposición al sedante.

Además, el tratamiento debe ser prescrito por personal debidamente formado, que constate el buen estado de salud del paciente.