Patologías traumatológicas más frecuentes en la mujer


Rubén Goñi Robledo. FEA Traumatología y ortopedia. Complejo Hospitalario de Navarra. Marta Aguado Sevilla. MIR Anestesiología y reanimación. Complejo Hospitalario de Navarra

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No son pocas las patologías en la especialidad de traumatología y ortopedia que afectan con mayor frecuencia a la mujer.

Por orden de frecuencia podemos citar:

1. Artrosis

La patología que con más frecuencia es atendida en nuestra consulta afecta en mayor proporción al sexo femenino. Según el estudio EPISER 2000 realizado en España, la relación mujer-hombre en pacientes de más de 60 años es de 3:1.
La causa es una pérdida del cartílago presente en las articulaciones, que es un protector de las mismas, elástico, que resiste el impacto entre los huesos. El dolor artrósico es mecánico, que desaparece al “calentar” la articulación. El tratamiento inicialmente es conservador, con analgesia y rehabilitación articular o infiltraciones. Si lo anterior falla, podría valorarse el reemplazo articular por una prótesis. Por orden de frecuencia de afectación articular encontramos las siguientes localizaciones:
• Rizartrosis, o artrosis de la articulación del pulgar.
• Artrosis de la columna vertebral
• Gonartrosis y coxartrosis, en rodilla y cadera respectivamente

2. Osteoporosis

Estrictamente es una disminución de la masa del hueso en relación a su volumen. Ocurre principalmente debida a la edad y cambio hormonal en la mujer (en la mujer menopáusica hay una disminución de estrógenos). Hay otros factores como la toma de determinados fármacos, tabaco, alcohol, obesidad…
El resultado final es un hueso más frágil y susceptible a fracturas en determinadas localizaciones como la muñeca, columna vertebral o cadera, ante traumatismos vanales. Se estima que la prevalencia en este tipo de fracturas es del 3 a 1 en la relación mujer-hombre. El tratamiento dependerá de la causa fundamental, pero suelen usarse fármacos que tratan de restaurar la arquitectura ósea normal, denominados “osteoformadores”.

3. Lumbalgia

La lumbalgia es el dolor lumbar bajo, con o sin irradiación a las extremidades inferiores (ciatalgia). El 70-85% de la población adulta sufrirá algún espisodio de lumbalgia en su vida. Cerca del 8% de la población adulta española en edad laboral está afectada de manera crónica por esta patología. La prevalencia en nuestro medio es deL 15-45% y es mayor en mujeres de más de 60 años (postmenopáusicas). En ambos sexos, se estima en cerca de un 8% en mujeres y un 7,5% en hombres. Las causas de lumbalgia o lumbociatalgia pueden ser muy variadas, destacando la artrosis, postraumática, los hábitos de vida actuales, estenosis del canal lumbar, osteoporosis o hernias discales. Los tratamientos, dependiendo de la causa, también han de iniciarse de manera conservadora, con fármacos para el dolor y rehabilitación. Si la patología se cronifica y es de causa identificable y solventable mediante cirugía, podría valorarse la intervención quirúrgica.

4. Tendinopatías

Los tendones son las “cuerdas” que unen el músculo al hueso. La patología tendinosa encuentra una discreta proporción aumentada en la mujer, donde son frecuentes las tendinitis crónicas debidas a movimientos laborales repetitivos. Dentro de este amplio grupo de patología destacamos en pacientes jóvenes en edad laboral las siguientes:
• Epicondilitis o “codo de tenista”: dolor en la zona externa del codo, lugar de asiento de los tendones extensores.
• Tendinitis D´Quervain, localizada en la muñeca en relación con dos tendones del dedo pulgar.
• Tendinitis del manguito rotador del hombro.
Inicialmente se tratan con reposo, antiinflamatorios, fisioterapia y férulas que evitan el movimiento que desencadena el proceso. Es muy efectivo también el cambio de actividades repetitivas tanto en el ámbito laboral como deportivo.

5. Alteraciones del pie

Son varias las patologías en las que la mujer presenta una mayor incidencia:
• Hallux valgus: deformidad del primer dedo del pie hacia fuera (valgo) o juanete. Patología típicamente femenina, aunque no exclusiva de este sexo. Prácticamente el número de casos se triplica en el caso de la mujer frente al hombre.
• Pie cavo: aumento del arco en la parte interna del pie. El pie plano, o ausencia de este arco es sin embargo más frecuente en el hombre.
• Entorsis de tobillo: esguinces de la parte externa del tobillo. Más frecuentes en la mujer, sobre todo en mujeres jóvenes que realizan deporte de manera habitual.
Se producen por una posición forzada del tobillo que lesiona los ligamentos de la parte externa.
La mayoría de estas patologías se tratan de forma conservadora con altas tasas de éxito, utilizando plantillas u ortesis. La fisioterapia/rehabilitación es un pilar muy importante en el tratamiento. Si con estas medidas no es suficiente, se puede recurrir a las infiltraciones con corticoides o bien planificar una intervención quirúrgica.